Amsterdam, la ciudad sin ley

Mi resumen de este fin de semana: Amsterdam es la ciudad sin ley. Si, si. Y no solo porque en ella te puedas encontrar a las 4 de la tarde a un tío tirado en medio de la plaza Dam con los ojos como platos, gritando en un idioma incomprensible mientras otro tipo en camiseta de tirantes con pinta de no haber dormido en una semana y con una escalera al hombro le da puntapies a ver si está vivo. Tampoco porque puedas comprar hierba en cualquier herboristería especializada, que va. Amsterdam es la ciudad si ley porque todo aquel que no vaya montado en una bici está en peligro de muerte inminente.

Todo aquel que haya estado en Amsterdam habrá vivido en su carne nada mas poner pie en tierra ese 'ring, ring' que avisa que 'como no te quites te atropello'. Asusta de verdad, porque es un continuo goteo de bicicleteros intolerantes. Vamos, la ciudad es suya, y tu solo eres un mero objeto más. Hay veces que dan ganas de abrir los brazos en cruz y esperar un rato a que caigan como moscas. Estos holandeses están locos.

Otra historia es quien narices diseñó el plan de circulación, porque parece una conspiración no declarada para no poder salir del centro de la ciudad. ¿Y esos semáforos ilógicos que duran tres segundos en verde y dos minutos en rojo? Mi consejo: dejad el coche a las afueras. El que avisa no es traidor.

De todos modos hizo buen día, y Amsterdam es una bonita ciudad.

PD: ¿Porque hay tantas casas torcidas en esta ciudad? Es un misterio...